Un informe de 5G Americas titulado ‘Panorama del espectro de bandas medias para redes móviles en América Latina 2024’ que analiza el estado de las bandas de frecuencia para servicios móviles en el rango de 1 a 6 GHz a nivel regional señala cómo la llegada de las redes 5G en América Latina y el Caribe se ha centrado en el desarrollo de las bandas medias, principalmente en el uso de la banda de 3,5 GHz, complementada con la de 2,5 GHz.

Según datos de Omdia, para el segundo trimestre de 2023, los servicios 5G habían alcanzado los 1.400 millones de líneas en el mundo. Omdia pronostica que las conexiones LTE serán las más utilizadas en América Latina y el Caribe hasta 2026. A partir de 2027, las conexiones 5G liderarán los accesos, con un total previsto de 407 millones de líneas para ese año.

En abril de 2024, América Latina y el Caribe contaban con 134 redes LTE en operación y 39 redes 5G, con varios países realizando pruebas de 5G.

El proceso de despliegue ha sido distinto en cada país. Mientras mercados como el de  Chile, México, Perú y la República Dominicana utilizan la banda de 3,5 GHz para el desarrollo de redes 5G Non Standalone (NSA) . En Brasil, la licitación de esta banda, conocida como “Licitación 5G”, permitió a los operadores desplegar 5G Standalone (5G SA) a partir del segundo trimestre de 2022. Asimismo, otras bandas medias, como las de 1,7/2,1 GHz (AWS), 2,3 GHz y 2,5 GHz, se han utilizado en países como Argentina, Brasil, Colombia, México y Perú.

El informe también aborda las diversas aplicaciones potenciales en estas bandas, que incluyen realidad extendida, minería y servicios públicos, que buscan mejorar diferentes sectores de la economía.

 Asignación del espectro

Sin embargo, el informe enfatiza en las diferencias en los países de la región en los procesos de asignación de espectro radioeléctrico para servicios móviles. Las diferencias se observan no solo entre los 20 países de América Latina, sino también dentro de un mismo país, donde las reglas pueden cambiar antes de cada nuevo proceso de concesión. 

Recientemente, los gobiernos han adoptado enfoques mixtos, combinando subastas y procesos de revisión comparativa, y estableciendo requisitos de cobertura y velocidades mínimas para las nuevas licencias. “La línea divisoria entre las subastas y los procesos de revisión comparativa se vuelve borrosa, ya que cada vez más gobiernos incluyen como requisito para nuevas licencias (o renovación de las vigentes) aceptar obligaciones de cobertura y velocidades mínimas para el servicio de banda ancha móvil”, señala el informe.

Uso de las bandas 

En cuanto al uso de las bandas medias, al igual que la asignación del espectro, varia según país y gobierno. Por ejemplo, la banda de 2,3 GHz, aunque ha sido atribuida al servicio móvil en la mayoría de los países de la región, aún no ha sido ampliamente asignada, a excepción de Perú y Brasil. 

La banda de 2,5 GHz ha sido fundamental para la introducción de LTE en mercados importantes como Brasil y Chile, pero debe ser considerada en la planificación del espectro para IMT por los reguladores de los demás países que aún no la han asignado o que tienen capacidad disponible.

En el caso del reordenamiento de la banda de 3,5 GHz, los países han optado por llevar a cabo renovaciones de licencias, acuerdos específicos y procesos licitatorios. Sin embargo, en la mayoría de países los reguladores aún no han establecido mecanismos con términos razonables para fomentar inversiones en esta banda estratégica para el desarrollo global de 5G.

Futuro de las bandas medias

En cuanto al panorama del uso de las bandas medias en los próximos años, el informe estima que las bandas de 2,5 y 3,5 GHz se perfilan como cruciales para el desarrollo de sistemas 5G, al ofrecer una mezcla de capacidades de cobertura y ancho de banda. Además, bandas como 1427-1518 MHz, 2,3 GHz y 3,5 GHz son vistas por algunos reguladores como fundamentales para promover redes móviles privadas 5G y la transformación digital en sectores industriales.

Finalmente, el informe menciona otras bandas en el rango de 1 a 6 GHz que están siendo consideradas para nuevas capacidades de IMT, incluyendo bandas como 4,8-4,9 GHz y bandas extendidas que aún tienen capacidad disponible.