El martes 3 de junio, Perú dio un nuevo paso en su estrategia para combatir el uso y comercialización de celulares robados o de origen incierto. El Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones (OSIPTEL) inició el bloqueo de más de 130.000 equipos móviles que no se encuentran en la lista blanca del Registro Nacional de Equipos Terminales Móviles para la Seguridad (Renteseg) y que están asociados a personas con historial reiterado de uso de IMEIs inválidos o clonados.
El operativo se enmarca en una acción progresiva que busca desincentivar el mercado negro de celulares en el país. De acuerdo con datos del regulador, existen más de 1,5 millones de dispositivos calificados como de alto riesgo por presentar estas características, los cuales, serán desconectados de forma escalonada en los próximos meses. Tan solo entre abril y mayo de este año, se bloquearon alrededor de 240.000 equipos bajo este mismo criterio.
La implementación del Renteseg y las acciones de bloqueo masivo forman parte de una política más amplia del Estado peruano para reducir los índices de robo de celulares, un delito que ha tenido impacto directo en la seguridad ciudadana y en el mercado informal de dispositivos. El objetivo de estas medidas es reforzar el control sobre los equipos que se conectan a las redes móviles del país, garantizando que todos los celulares en circulación cuenten con un IMEI válido, no clonado y previamente registrado.
Proceso de bloqueo
El proceso de bloqueo se activa cuando el sistema Renteseg identifica un equipo móvil que no está inscrito en su base autorizada —la lista blanca— y lo vincula con abonados que tienen un historial de comportamiento irregular, como la reutilización constante de códigos IMEI clonados. Una vez detectados, el sistema ordena a las operadoras el bloqueo del equipo móvil. Las empresas tienen entonces un plazo de hasta dos días hábiles para enviar al usuario un mensaje SMS notificándole que su celular será bloqueado.
El mensaje informa que el bloqueo se ejecutará también en un plazo de dos días hábiles tras el aviso. Esto otorga a los usuarios un margen breve para reaccionar en caso de que consideren que el bloqueo de su equipo móvil es injustificado.
Para quienes hayan adquirido el equipo de forma legítima pero fuera del canal del operador —por ejemplo, en una tienda de electrónica o comercio especializado— y detecten que su celular ha sido o será bloqueado, OSIPTEL ofrece una alternativa para el registro. En estos casos, los usuarios pueden acudir directamente a las oficinas del regulador con el equipo móvil y, si lo tienen disponible, el documento que respalde su compra.
El personal técnico realiza una validación detallada del equipo, que incluye la verificación de que el IMEI físico (el que aparece grabado en la carcasa o la bandeja del SIM) coincida con el IMEI lógico, que puede obtenerse marcando *#06# desde el teléfono. Este paso es fundamental para confirmar que el dispositivo no ha sido manipulado ni alterado. Además, el usuario deberá firmar una declaración jurada en la que afirma la legítima adquisición del equipo.
En casos excepcionales, cuando se compruebe que un dispositivo fue adquirido de forma legal pero fue bloqueado por error o por no estar previamente registrado, OSIPTEL puede disponer su desbloqueo. El regulador aclaró que esta es una medida excepcional, que solo se aplicará si se acredita la procedencia lícita del equipo.
La imagen principal fue creada por Mobile Time con IA.
