En el vibrante escenario económico de América Latina, donde la búsqueda constante de nuevas oportunidades impulsa a las empresas a explorar caminos innovadores hacia el éxito, la Inteligencia Conversacional se posiciona rápidamente como una de las herramientas clave para potenciar el éxito empresarial.
En 2021, la inteligencia artificial conversacional se valoró en USD 6.8 mil millones y se estima que el 40% de las empresas en Latinoamérica ya la utilizan para sus estrategias de venta, marketing, atención al cliente y comunicación interna, sobre todo en los sectores de banca y seguros (65%), retail (60%), y telecomunicaciones (55%), según datos de NTT DATA. Para el año 2025, se estima que su popularidad aumente a 70%.
En este recorrido, por un lado, las empresas se han dado cuenta de la importancia de la omnicanalidad en un mundo digital. Por otro lado, los usuarios exigen experiencias cada vez más personalizadas a través de las plataformas que utilizan de manera cotidiana, como WhatsApp, que más del 64% de la población latinoamericana utiliza (Statista).
Y si la era conversacional ya está aquí, ¿qué sigue?
Con el auge de la inteligencia artificial moderna, y a medida que integra nuevos tipos de tecnología, la comunicación entre negocios y usuarios a través de plataformas digitales será cada vez más sofisticada y la diferencia entre interactuar con una máquina o un ser humano, será prácticamente imperceptible.
Con avances como GPT-4o, por ejemplo, suponen un potencial enorme para las interacciones digitales de las empresas y para su capacidad de resolución de los problemas, ya que puede gestionar distintos tipos de datos (texto, imágenes y audio) de forma simultánea. Explicado de forma más sencilla, GPT-4o hará posible interacciones en tiempo real que imitan conversaciones humanas reales, respondiendo en milisegundos con precisión.
Para los negocios en América Latina, trabajar de la mano de socios estratégicos, capaces de integrar esta tecnología como parte de sus soluciones, supone una ventaja en un mercado altamente competitivo. Por ejemplo, este tipo de tecnología, integrada a un canal conversacional, resulta en una experiencia de usuario intuitiva, eficiente y ultra personalizada, lo que mejora la atracción, retención y fidelización de los clientes.
En Blip, estamos comprometidos a seguir liderando el camino hacia un futuro más inteligente y conectado para todas las empresas en América Latina, donde la innovación y la tecnología sean los motores que impulsen el progreso y el crecimiento empresarial.