Con el fin del soporte para Windows 10 en el horizonte y una base instalada obsoleta. Intel estima que más de 60 millones de dispositivos, entre equipos de consumo y plataformas empresariales, están listos para ser actualizados. Ante ese panorama, la compañía lanza una estrategia que busca liderar este proceso en toda la región y abrir espacio a su nuevo portafolio comercial en el que la IA es un complemento.
Esta estrategia hace parte de la renovación que busca la empresa con el reciente nombramiento de su CEO, Lip-Bu Tan, quien apuesta por una nueva era gracias a la IA y ha seguir posicionándose en el mercado de chips a nivel mundial.
“Tenemos una estrategia muy clara de ganar el refresco”, señaló Juliana Hurtado, nueva Country Lead de Intel Colombia. La empresa está invirtiendo de forma decidida, junto con su ecosistema de socios, para comunicar los beneficios de actualizar a tecnologías más recientes y mantener la fidelidad a su plataforma.
El adiós de Windows 10
Como el fin del soporte oficial para Windows 10 es un hecho, también lo es que los equipos podrían dejar a millones de usuarios sin actualizaciones de seguridad, exponiéndolos a riesgos críticos. Un punto de inflexión en el que muchas empresas y consumidores deberán renovar sus equipos, y la meta es que lo hagan a través de la tecnología Intel.
Aunque la empresa no revela cifras específicas por mercado, sí confirma que la estrategia de renovación se aplicará en toda América Latina, con Brasil como el mercado más grande, seguido por México, Argentina y Colombia. En todos los países, el mensaje será ‘renovar es necesario y urgente’, tanto por razones de seguridad como por eficiencia tecnológica.
Para facilitar este proceso, Intel está trabajando con canales locales y socios de negocio para educar a los usuarios, generar incentivos y ofrecer productos con mejores especificaciones. “No se trata solo de reemplazar un equipo viejo, sino de mostrar lo que puede hacer una máquina moderna”, explica Juliana Hurtado.
Uno de los cambios más notorios que detecta Intel es que muchos usuarios que compraron laptops o PCs de gama básica hace algunos años ahora están listos para dar el salto a configuraciones más potentes. Esto se refleja, por ejemplo, en el crecimiento en ventas de procesadores de gama alta como el Core i9, cuyas ventas se triplicaron en algunos mercados de la región.
“Estamos viendo una evolución en el comportamiento del consumidor”, afirma. Ya no se trata solo de tener un equipo funcional, sino de garantizar compatibilidad con nuevas aplicaciones, inteligencia artificial, productividad y mejores experiencias de usuario.
La compañía también resalta el papel que jugará la inteligencia artificial en esta nueva generación de equipos, permitiendo delegar tareas complejas, optimizar el rendimiento del sistema y liberar recursos para otros procesos.
“El cambio no es solo en América Latina, sino global. Pero nuestra región tiene particularidades que la convierten en una oportunidad enorme: una base instalada amplia, desafíos de infraestructura y un ecosistema de socios muy activo”, afirma Hurtado.
Proyecciones para 2025
Con esta estrategia de renovación en marcha, Intel proyecta un crecimiento de un dígito alto en América Latina para 2025, impulsado por la renovación masiva y el fortalecimiento de su portafolio de productos. Por lo que anticiparon que habrá nuevos lanzamientos hacia fin de año, con novedades que podrían tener impacto global en eventos como el CES.
Foto Principal: Laura Suárez