Los días 15 y 16 de julio de 2025 fueron publicadas en el Diario Oficial de la Federación dos reformas clave para el ecosistema digital mexicano: la nueva Ley en Materia de Telecomunicaciones y Radiodifusión, y las modificaciones a la Ley Federal de Competencia Económica (LFCE). Ambas entraron en vigor de forma inmediata.
Estos cambios suponen una reconfiguración del modelo regulatorio vigente, con la creación de dos nuevos órganos, nuevas reglas para los operadores, y un enfoque más estricto en materia de libre competencia.
Dos nuevos entes reguladores: CRT y CNA
Con la reforma, desaparecen el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece). En su lugar, nacen la Comisión Reguladora de Telecomunicaciones (CRT) y la Comisión Nacional Antimonopolios (CNA), que asumirán sus funciones.
La CRT se encargará de aplicar medidas asimétricas para garantizar condiciones equitativas en el mercado, mientras que la CNA tendrá la facultad de determinar la existencia de poder sustancial de mercado, preponderancia económica y ausencia de competencia efectiva. Estas atribuciones eran anteriormente responsabilidad del IFT.
Según Samuel Bautista, analista en The CIU, “el momento crucial que viene es la conformación del pleno de cinco comisionados de la CRT, pues un día después de ese momento quedará extinto el IFT”, explicó en una entrevista con Mobile Time Latinoamérica.
Al respecto, Ernesto Piedras, director general de The CIU, advirtió: “Cuando el diagnóstico de competencia está en un lugar y las herramientas para remediar están en otro, hay un riesgo de parálisis o inconsistencia”.
Ambos expertos coinciden en que esta separación de funciones podría generar vacíos regulatorios si no existe una coordinación ágil y clara entre ambas comisiones. “¿Qué pasará si la CNA determina que un actor tiene poder sustancial, pero la CRT no aplica las medidas necesarias. Ese tipo de lagunas podría generar ventajas indebidas o bloquear la entrada de nuevos competidores”, advirtió Bautista.
Impacto sobre nuevos jugadores y licencias
Una de las implicaciones más relevantes será el proceso de entrada de nuevos operadores móviles o fijos al mercado. Bajo la nueva estructura, un operador deberá solicitar concesiones comerciales y de espectro ante la CRT y cumplir con las condiciones de competencia —como acceso a redes mayoristas o tarifas de interconexión— que determine la CNA
Esto implica una doble ventanilla que podría ralentizar los procesos si no se establecen mecanismos efectivos de cooperación entre ambas comisiones. “Antes, el IFT concentraba ambas funciones, lo que permitía una integración regulatoria más ágil”, comentó Bautista.
Reglas en la competencia de mercado
Las reformas a la Ley de Competencia fortalecen el régimen sancionador para las empresa en México. Entre los cambios más importantes están las multas por colusión (prácticas monopólicas absolutas), que se elevan hasta un 15% de los ingresos anuales del infractor. Además señala que las empresas que incurran en colusión podrán ser inhabilitadas hasta por cinco años para participar en contrataciones públicas.
Una de las críticas más fuertes a este nuevo marco institucional es el mecanismo de nombramiento de los comisionados de la CNA. Estos serán designados directamente por la presidenta de la República, sin intervención del Senado ni de órganos autónomos.
Esto ha generado dudas sobre la independencia y el rigor técnico del nuevo órgano, por estar rodeado en un entorno político polarizado, la política de competencia podría dejar de ser una herramienta correctiva de mercado para convertirse en una herramienta política.
Piedras también alertó: “El cambio institucional pone en riesgo la continuidad de una política pública basada en evidencia técnica. Si la CNA actúa más como un brazo político que como un regulador técnico, la política de competencia dejaría de proteger la pluralidad y el interés público.”
CFE como nuevo operador
Otro cambio significativo es que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) podrá solicitar concesiones únicas y espectro de uso comercial, lo que abre la posibilidad de que participe directamente como operador en el mercado.
Aunque la ley establece que dicha participación debe regirse bajo el principio de neutralidad competitiva, aún no se ha definido cómo se evitarán posibles conflictos de interés, sobre todo considerando que CFE usa infraestructura financiada con recursos públicos.
“La entrada de CFE como operador debe venir acompañada de una supervisión estricta por parte de la Comisión Antimonopolios, de lo contrario puede afectar a otros jugadores que no tienen las mismas condiciones estructurales o ventajas de red”, explicó Bautista.
CURP obligatoria para líneas móviles
La nueva ley establece que los operadores de telecomunicaciones, tanto tradicionales como virtuales, solo podrán activar líneas móviles asociadas a usuarios que presenten una identificación oficial con CURP. Los lineamientos específicos para esta medida serán definidos por la CRT.
La imagen principal fue creada por Mobile Time con IA.