La presidenta mexicana Claudia Sheinbaum anunció la creación de la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones durante “la mañanera del pueblo”, su conferencia diaria matutina. Esta nueva instancia gubernamental estará encabezada por José Antonio Merino y tendrá dos áreas clave: Infraestructura Pública Digital y Transformación Digital.
La primera estará a cargo de Jorge Luis Pérez Hernández y supervisará políticas de telecomunicaciones y radiodifusión, funciones que previamente correspondían a la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT). La segunda tendrá como objetivo digitalizar los trámites en el país.
Entre las nuevas atribuciones de la Agencia destaca la supervisión de Altán Redes, empresa encargada de la Red Compartida y proveedora de infraestructura de telecomunicaciones en México.
Esta vigilancia incluye monitorear el desempeño y los compromisos de Altán, así como su cumplimiento en el pago de derechos por el uso de la banda de 700 MHz, una facultad anteriormente asignada al Organismo Promotor de Inversiones en Telecomunicaciones (Promtel), que ahora se extingue tras una reciente reducción operativa y el traspaso de responsabilidades a la nueva agencia.
Durante la presentación oficial, Merino aseguró que esta transición fortalecerá la adopción de internet en la población y contribuirá a reducir la brecha digital. “Al trasladar las facultades de la SICT a la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones, podremos impulsar la conectividad y con ello ayudar a cerrar las desigualdades en el país”, declaró en la conferencia matutina.
¿Cuáles serán las funciones de la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones de México?
La Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones asumirá múltiples funciones para mejorar la infraestructura digital y la inclusión tecnológica. Entre sus principales responsabilidades se encuentran:
- Políticas de inclusión D¿digital y conectividad: Formular políticas para expandir el acceso a internet y garantizar la cobertura de servicios de telecomunicaciones en sitios públicos, impulsando así la inclusión digital en todo el país.
- Identidad y ciudadanía digital: Promover la identidad digital y un mecanismo de autenticación basado en la Clave Única de Registro de Población (CURP), en coordinación con la Secretaría de Gobernación, para asegurar la protección de los datos personales.
- Interoperabilidad de bases de datos: Facilitar la integración de bases de datos nacionales con sistemas de la administración pública federal para una gestión más eficiente de la información, respetando los límites en temas de seguridad nacional.
- Desarrollo de tecnología y software público: Crear e implementar soluciones tecnológicas y de software para los servicios gubernamentales, con el objetivo de agilizar la digitalización de trámites y servicios.
- Supervisión de infraestructura y espectro satelital: Administrar la capacidad satelital para garantizar la conectividad en áreas de seguridad nacional y servicios públicos.
- Seguridad de la información: Definir y supervisar protocolos de seguridad en información y comunicaciones de la administración pública.
El nacimiento de esta agencia conlleva varios desafíos, entre ellos, consolidar un marco regulatorio que fomente la soberanía tecnológica del país, así como garantizar la transparencia en la gestión de datos.
Aunque la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones aún debe ser aprobada por el Senado, se espera que comience a operar a partir del 1 de enero de 2025, marcando un nuevo capítulo en la transformación digital del país.
Actualmente, algunas facultades regulatorias sobre espectro siguen en manos del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT). Sin embargo, este último está por desaparecer por lo que sus funciones se transferirían al Ejecutivo Federal, lo que significa que el gobierno tendría control directo sobre el otorgamiento, revocación y renovación de concesiones de telecomunicaciones y radiodifusión, decisiones que anteriormente recaían en el organismo autónomo.
