Más de 10 millones de personas en México resultaron potencialmente afectadas por la práctica monopólica relativa atribuida a Comercializadora de Frecuencia Modulada (OXXO), propiedad de FEMSA y Telcel, en perjuicio de AT&T. Así lo señala un expediente realizado por la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece).
«No es de desestimar que, bajo cualquier especificación del radio, la población afectada sobrepasa al menos 10 millones de habitantes y pudiendo alcanzar cerca de 19 millones en el radio más amplio», detalla el dictamen de probable responsabilidad.
Según el documento, la exclusión de AT&T afectó la conectividad de los usuarios teniendo en cuenta que hay regiones donde OXXO es la única alternativa para adquirir una línea móvil. Así lo informaron representantes de la empresa durante la 12a reunión ordinaria de la Comisión de Comunicaciones y Transportes del Senado de la República, celebrada el 11 de junio de 2024, que busca
El caso se originó el 29 de junio de 2021, cuando AT&T denunció ante el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) una posible práctica monopólica relativa derivada de la negativa de OXXO a comercializar sus tarjetas SIM. La Autoridad Investigadora del IFT abrió el expediente AI/DE-004-2021 y tras una indagatoria de más de dos años, concluyó que existió una estrategia concertada entre Telcel, OXXO e IMMEX (empresas del grupo FEMSA) para bloquear el acceso de AT&T a la red de tiendas OXXO.
La negativa injustificada de comercializar tarjetas SIM de AT&T se tradujo en una barrera artificial de entrada para millones de usuarios que buscaban contratar servicios móviles. Según el análisis presentado ante el Pleno de la Cofece, esta decisión restringió el acceso de consumidores en todo el país a una oferta competitiva en telecomunicaciones móviles.
En particular, más del 15% de la población en zonas de influencia directa de tiendas OXXO —donde no existen otras opciones equivalentes— vio limitada su capacidad de elección al no encontrar productos de AT&T en los puntos de venta más cercanos.
El dictamen del IFT detalla que del 12 de enero de 2021 al 24 de enero de 2024, OXXO no vendió SIMs de AT&T, pese a que sí comercializaba los de Telcel y OXXO CEL, operador móvil virtual (OMV) que opera sobre la red de Telcel. Esto ocurrió a pesar de que AT&T ofreció asumir los costos logísticos y operativos requeridos para integrarse a la red de distribución de OXXO.
Impacto económico de 95 millones de dólares
El impacto económico directo de la exclusión de AT&T en las tiendas OXXO fue estimado en 95 millones de dólares, únicamente en el mercado relevante de venta de tarjetas SIM al mayoreo, según datos incluidos en el dictamen de probable responsabilidad. Esta cifra surge de la proyección de ingresos que AT&T habría podido generar si hubiese tenido acceso a los cerca de 19.000 puntos de venta físicos de OXXO entre 2021 y 2024.
Teniendo en cuenta tanto el valor unitario de las tarjetas SIM (30 pesos mexicanos), como la escala de distribución potencial en un canal que concentra el 40% de la cobertura urbana nacional, sin contemplar el impacto adicional en recargas, activaciones ni lealtad de clientes a largo plazo, se evidencia el daño directo en términos de oportunidades de venta por la negativa de trato atribuida a Telcel y al grupo FEMSA.
AT&T se ha consolidado como uno de los tres principales operadores móviles del país, pero la falta de acceso a estos puntos de contacto limitó su crecimiento en etapas clave de su expansión.
La resolución revela cómo esta exclusión redujo el incentivo de AT&T para competir agresivamente en precio o innovación en esos territorios. Al no contar con presencia física en el canal dominante, la empresa enfrentó mayores costos de captación, menos oportunidades para realizar campañas masivas y un menor retorno sobre inversión en publicidad dirigida. Esto no solo afectó su desempeño comercial, sino que distorsionó el equilibrio competitivo al interior del mercado móvil mexicano.
Otro de los efectos señalados por el regulador fue el desequilibrio en la cadena de suministro. Al otorgar un trato preferencial a otras marcas, algunas incluso operadas por OXXO, como OXXO CEL, incurrió en una conducta que privilegió productos propios o de socios específicos.
El dictamen de la Autoridad Investigadora del IFT concluyó que la conducta vulneró el artículo 10 de la Ley Federal de Competencia Económica, al incurrir en prácticas de negativa de trato sin justificación objetiva, afectando tanto la competencia como el bienestar de los consumidores.
Exclusión de AT&T generó más gastos operativos
El impacto no solo fue en la esfera del consumidor. La exclusión también debilitó las capacidades de AT&T para competir en condiciones equitativas frente a sus rivales. Al ser vetada de más de 20.000 puntos de venta físicos, la operadora quedó en desventaja respecto a competidores que sí tenían presencia en los estantes de OXXO.
Durante la sesión, ejecutivos de AT&T México explicaron que esta exclusión ha tenido un efecto directo en sus operaciones, debido a que OXXO representaba uno de los canales de recarga más importantes para sus clientes prepago.
En la práctica, fue excluida de una red que abarca más del 80% de las localidades urbanas del país y tiene una penetración estratégica en mercados rurales o semiurbanos, donde otras cadenas de distribución tienen menor presencia o alcance limitado. Según el IFT, la afectación recayó en usuarios de bajo consumo o sin acceso frecuente a servicios bancarios, que dependían del canal físico para mantener activas sus líneas móviles.
Asimismo, el expediente señala que, al limitarse la posibilidad de adquisición inmediata y accesible del servicio, se vulneró el principio de portabilidad efectiva. Esto afectó la libre elección de proveedor por parte de los usuarios y acentuó las asimetrías ya existentes en la cadena de distribución.
El IFT también desestimó los argumentos de Telcel y OXXO sobre la supuesta falta de atractivo comercial de las SIM de AT&T, al considerar que el precio de 30 pesos mexicanos por chip era equiparable al de otras marcas que OXXO sí vendía, e incluso más barato que otras ofertas de Telcel. También se desestimó la idea de que las eSIM fueran una alternativa suficiente, al reconocer que sólo equipos de gama alta eran compatibles con esa tecnología en el periodo 2021-2024.
Legisladores de la Comisión de Comunicaciones y Transportes expresaron su preocupación por las implicaciones que este tipo de decisiones podrían tener en términos de competencia y acceso a servicios.
Empresas impugnarán decisión
Como resultado, se les impuso una multa de 1.782,6 millones de pesos mexicanos a Telcel, mientras que OXXO y su filial recibieron cada una una sanción de 19,5 millones de pesos.
Mobile Time Latinoamérica consultó a FEMSA sobre el dictamen, la empresa señaló que tanto OXXO como IMMEX fueron notificados por el IFT sobre una resolución que les atribuye participación indirecta en una supuesta práctica monopólica relativa, relacionada con la venta de tarjetas SIM, con la que no están de acuerdo.
«Respetuosamente, no coincidimos con los fundamentos de dicha resolución, ya que no refleja la realidad de nuestro modelo de negocio, caracterizado por una oferta amplia, diversa y abierta, con más de 20 proveedores de tiempo aire y 4 de tarjetas SIM». Añadió que van a impugnar la decisión por las vías legales correspondientes.
Por su parte, AT&T respondió que no tiene comentarios sobre el tema.
La imagen principal fue creada por Mobile Time con IA.