El Gobierno de Chile y Google firmaron este miércoles un acuerdo para la instalación del primer cable submarino de fibra óptica que conectará Sudamérica con Oceanía. El proyecto, denominado Cable Humboldt, permitirá una conexión directa y de alta velocidad entre Chile y Australia, consolidando al país como la puerta de entrada digital del Pacífico y un hub estratégico en América Latina.
Con más de 14.000 kilómetros de longitud, el cable permitirá la transmisión de datos de forma más rápida, segura y directa entre ambos continentes. Se espera que la instalación comience en 2025 y entre en operación durante el último trimestre de 2026.
La implementación estará a cargo de la firma Humboldt Connect, y su impacto va mucho más allá de la conectividad: fomentará el desarrollo de la industria tecnológica nacional, incluyendo software, ciencia de datos e inteligencia artificial.
Además, esta infraestructura permitirá fortalecer el rol de Chile como centro de servicios digitales, atrayendo inversiones internacionales en tecnologías como data centers, satélites y redes submarinas.
Beneficios geoestratégicos del Cable Humboldt
El Cable Humboldt no solo mejorará la calidad de las conexiones a internet —más robustas y estables— sino que también facilitará el intercambio de información científica entre América Latina, Oceanía y Asia. Esta conectividad directa con el Asia-Pacífico tiene implicaciones geopolíticas para la región.
Actualmente, Chile solo cuenta con una conexión directa a Estados Unidos. Este nuevo enlace representa un avance crucial en la diversificación de rutas digitales, reduciendo la dependencia de otras infraestructuras y fortaleciendo la resiliencia tecnológica del país.
Liderazgo regional en IA
La iniciativa se alinea con otras políticas del Gobierno para posicionar a Chile como líder digital, como la Política Nacional de Inteligencia Artificial y la creación del Centro Nacional de IA. Según el gobierno chileno, la infraestructura será clave para el desarrollo de sistemas de IA avanzados, que requieren una gran capacidad de procesamiento y conectividad internacional.
Con el Cable Humboldt, Chile avanza en su objetivo de convertirse en el nodo digital más importante del hemisferio sur.