Durante su participación en el 60.º Congreso de la Unión Nacional de Estudiantes (CONUNE) en Goiânia, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva declaró su intención de gravar a las grandes empresas tecnológicas estadounidenses. «Y él (Donald Trump) no quiere que las empresas estadounidenses de plataformas digitales paguen impuestos en Brasil. Les diré una cosa: el mundo necesita saber que este país es soberano porque el pueblo brasileño está orgulloso de su país. Y quería decirles que juzgaremos y gravaremos a las empresas digitales estadounidenses», declaró este jueves.
En su discurso, Lula afirmó que Brasil no tolerará discursos de odio, racismo ni desinformación.
«No aceptamos que, en nombre de la libertad de expresión, se cometan agresiones, mentiras, daños, violencia contra la infancia, odio entre niños, violencia contra las mujeres, violencia contra las personas negras y violencia contra la comunidad LGBTQIA+. Aquí no lo permitiremos, porque el pueblo brasileño es dueño de Brasil y no permitiremos que nuestros hijos sean víctimas de cosas que escapan a nuestro control», dijo el mandatario.
El presidente brasileño también comentó que le gusta negociar y que el país permanecerá en la mesa de negociaciones, con el vicepresidente Geraldo Alckmin y el canciller Mauro Vieira liderando el proceso.
Lula en comunicado oficial
A pesar de decir que el gobierno federal quiere gravar a las grandes empresas tecnológicas, en su discurso en radio y televisión nacional el jueves por la noche, Lula no comentó sobre esa intención.
En su discurso, el presidente afirmó que las empresas extranjeras deben respetar las leyes brasileñas y que «nadie está por encima de la ley». Afirmó que las familias brasileñas deben estar protegidas de personas o empresas que utilizan los medios digitales para promover estafas, fraudes, delitos, incitar a la violencia y difundir desinformación. También afirmó que estas acciones constituyen un atentado contra la democracia.
En su discurso, Lula afirmó que Brasil sigue invirtiendo en “buenas relaciones diplomáticas y comerciales no sólo con EE.UU., sino con todos los países del mundo”.
El presidente también respondió a las amenazas contra Pix: «Además, Pix es brasileño. No aceptaremos ataques a Pix, que es patrimonio de nuestro pueblo. Tenemos uno de los sistemas de pago más avanzados del mundo y lo protegeremos».